Anoche te sentí como a una extraña...

[Francisco Escobar Bravo]

Anoche te sentí como a una extraña...
Difícil de escribir es esta frase.
Por poco si las lágrimas empañan
mi vista, no sabiendo quí contarte.

Extraños en verdad ya que sí somos,
no hay nada que nos una estando lejos.
¿Por qué no estás aquí? Ni por asomo
acierta a comprenderte mi cerebro.

¿Por qué dijiste adiós cuando no hubo
motivos por mi parte, ni razones;
los sueños del ayer ahora son humo,
las risas se tornaron en dolores.


Y sé que volveré de nuevo a verte...
De fútbol hablaremos; o del tiempo.
Maldigo con furor a aquella gente
que urdió tanto falsía y tanto cuento.

La culpa sé fue suya mas, no obstante,
debieras tú de haberme consultado;
perdiste tu fe en mí­, fuiste cobarde...
¡Son estos, ya lo ves, los resultados!

En vez de poder ser ama y señora
de toda mi ilusión, ya no eres nada:
Un nombre que me encuentro por las ondas;
saludos y tan sólo unas palabras.

[Esther Luscinda Melcón]

ya te recojo el cero, siempre a vueltas con el amor,
lo escribes muy poético, pero me gustaría que
alguna te amara hasta el paroxismo...
tal vez llegarías a ese paraíso...
un abrazo de esther Luscinda

[Francisco Escobar Bravo]

Querida Esther, lo primero agradecerte tu ayuda para ingresar en este Foro. ¡Gracias, amiga!
Después, volver a reiterarte mi agradecimiento por lo del cero. Pero, mira, lo de que llegue una que me ame hasta el paroxismo mejor lo dejamos para nunca, ¿eh?
¡Que bien caro me ha costado ese mismo asunto donde ya sabes!
Y por supuesto que tengo quien me quiera, pero sin locuras sino tranquilamente.
Muchos besos, amiga mía.
Procuraré leerte más a menudo, lo prometo...
Paco

[Antonia Pérez Garcí­a]

Estimado don Francisco...es este poema de lo más sentido,me ha gustado mucho.
Un abrazo de Antonia.

[Francisco Escobar Bravo]

Muchas gracias, doña Antonia. Así se llamaba mi difunta madre, por cierto; igual que mi hermano mayor.
Así que pasado mañana ya sé qué tarea tengo que hacer.
Además, mi hijo se casó tal dí­a hace 4 años.
Me complace mucho que le haya agradado mi poema. Lo escribí, quizás no se lo crea pero es cierto, en el autobús viniendo a mi casa; y luego, parándome cada diez metros para añadir un verso.
El final lo escribí sobre el ordenador, directamente.
Se ve que el domingo estaba la Musa conmigo. O que la noche anterior charlé con la mujer a quien se lo escribo y solamente supe lamentarme con ella de que su equipo de fútbol había perdido la Liga.
Ya ve cómo acaba un amor grandísimo. El segundo más grande que he tenido en mi vida.
El primero es mi esposa, por supuesto; pero prefiero no hacer comparaciones.
Gracias por su tiempo y por su lectura.
Paco

[Graciela Soto]

Que bonitos endecasílabos Francisco. Un placer pasar por aquí. Muchos cariños.
Graciela

[Francisco Escobar Bravo]

Gracias de nuevo, Graciela. Antes lo escribí con ll, perdón.
Como habrás comprobado, asonantada o aconsonantada, la medida de 11 sí­labas es la que mejor se me da; creo.
Pero ya habrá ocasión de escribir otras estrofas, que espero que te agraden también.
Muchas gracias y muchos besos.
Paco