A mi esposa que murió de cáncer y que pronto será su aniversario sacado de algunas de nuestras conversaciones
amándonos de forma transparente,
es mundo cristalino, diferente,
donde una realidad es la quimera
de un mundo que carece de frontera
con este nuestro amor, siempre presente.
ESQUEMA TERMINAL +
Soy un alma mutante, en lontananza.
Me inclinado ante el altar del tiempo inerte
para esperar con gran valor la muerte.
Vivo en resignación, sin esperanza.
Gemido de mortal, es mi alabanza,
en esa dignidad, que nace al verte,
para probar que nadie ha de temerte;
en ese cruel final que nos alcanza.
Mi esquema terminal aquí presente
marchita el exterior de mi figura
con cambios que realiza lentamente.
Y el alma que parece un sol poniente
despoja aquel dolor y la tortura,
para empezar un viaje permanente.
Gallnnet
Gracias por leerme.