Castro ha dicho, el noble juez,
que la Infanta está imputada.
Pienso que enorme es machada,
el imputarla, ¡pardiez!
Sería la única vez
que tal suceso sucede,
aunque sospecho que puede
todo en agua de borrajas
quedar por quita esas pajas
y el caso en nada se quede.
Pero bemoles ha echado
el buen juez con su actitud,
coraje y gran rectitud
al menos ha demostrado.
Otra cosa es que olvidado
quede muy pronto el asunto.
Al fin y al cabo es trasunto
la Infanta del mismo Rey
y aunque igual diga es la Ley
que no lo será barrunto.
Desde luego que en prisión
no ingresará la Cristina
y hallará en ello una mina
la Prensa del corazón.
De que opino con razón
no tengo la menor duda,
ya veremos cómo muda
el veredicto al final.
Pues pesa más lo real
que la sentencia más cruda.
La gloria es del que la busca; la suerte de quien la encuentra.
No tenga duda que éstas décimas
me reencantan leerlas, apropiadas
y deseadas y... a pesar de mi gripe,
le doy aplausos....plas,plas,plas,
Un abrazo.
Antonia.
Un poema... ¡ Que mágica manera de decir que estoy presente !
Me alegra que le hayan gustado, estimada Antonia.
Cúidese esa gripe, que si se curan mal luego pueden causar consecuencuas desagradables.
Muchas gracias por su amable comentario, feliz año y muchos besos.
Francisco
La gloria es del que la busca; la suerte de quien la encuentra.
Muchas gracias, estimado amigo Daniel.
Le agradezco mucho su amable comentario y me alegro de que le haya gustado el poema.
Muy reconocido por su tiempo, compañero.
Un fuerte abrazo.
Francisco
La gloria es del que la busca; la suerte de quien la encuentra.