Todos los días converso a mi mismo.
Despertar de amanecida solitario
recordando a mi compañera, el realismo
de los años caminados, cual rosario.
Buenos días me digo mirando un abismo
otro día más, mirando la hora, un herbario
de ricas flores, rosas rojas c asi negras, atisbos
de incógnitas, mirar futuro, casi centenario.
Algún día de estos encontraré a mi itsmo,
viajando a mi hábitat, cuna mi futuro, mi todo,
regresando por donde vine, en busca de mi yo
único camino del eterno retorno hacia lo mismo
paradero final de los destinos, alargando la vida
al encuentro de lo soñado, paz, tranquilidad
allí sé me están esperando,
aquellos seres míos que adelantaron viaje
abriendo espesuras, camino,
recodos, creyendo en mí