yo ando por sus calles.
Con una mochila, un libro, un cuaderno,
y mi vieja guitarra colgada en bandolera.
Paso noches enteras cantando en las tabernas,
y alboradas al alba,
de amores, cuentos y leyendas, de verdades y esperanzas.
Llega la luna en la noche atrapándome la mañana,
con mi canto desgarrando la guitarra.
Escucha mi canto que te cantare una nana,
y si me pagas una copa, te doy consuelo para tu alma,
te contare un cuento, de una vida ya pasada,
de un viejo poeta, que muriendo de amores,
toca esta vieja guitarra
